Durante mucho tiempo me enfadaba, aunque no siempre lo manifestaba, cuando alguien me decía que tenía una flor en el culo. Todavía hay momentos en los que me perturba, sobre todo, cuando ese día ya lo tengo cruzado. Decirle a alguien que tiene una flor en el culo es menospreciar su esfuerzo y su trabajo. La suerte no se crea, se trabaja porque por mucho que seas buena en algo si no te lo curras, seguirás sin avanzar.
Para cumplir un sueño hay que renunciar a muchísimas otras cosas. Mi primer gran sueño fue ser independiente económicamente, así que cuando después de echar el currículum en el aeropuerto de Málaga me llamaron, no lo dudé. Los primeros meses, hasta que conseguí un segundo trabajo, no ganaba más de 450€ y con eso pagaba mi habitación en Málaga, gasolina, comida y demás detalles para sobrevivir. En mi familia se ofrecieron a ayudarme pero yo no quería ayuda de nadie.
En esa época volví a escuchar la maldita frase de que tenía una flor en el culo y yo pensaba <<¿tengo una flor en el culo por levantarme a las 3 de la mañana porque mi turno empieza a las 4 o la tengo porque a veces echo más de 12 horas entre los dos trabajos?>>
Cada vez que viajo escucho la misma cantinela. Y no, no es flor en el culo, es trabajar, renunciar y ahorrar. Prefiero no comprarme ropa, salir de fiesta o dormir en un hotel por poder viajar durante más tiempo como mochilera. Por eso, amiga, te entiendo cuando se te enerva la sangre cuando alguien quiere quitarle mérito a todo el esfuerzo que hay detrás de tus logros. Las dos sabemos que no se llega a todo, que hay que seleccionar y en la mayoría de ocasiones, esa elección supone mucha más renuncia y sacrificio de lo que se ve.

Suena el redoble de tambores y el corazón a mil. ¡He vuelto al canal!
Después de un parón más largo de lo que yo esperaba, estoy de nuevo frente a la cámara compartiendo este amor tan grande que tengo por los libros.
Volver a grabar para el canal ha sido duro y queda mucho que pulir hasta que los vídeos tengan el nivel técnico que quiero. Lo bonito es que me queda un camino precioso que ...
"Dejar de verse con el alma para verse con los ojos"
El libro De los amores negados de Ángela Becerra cayó en mis manos por casualidad. Ha llegado a convertirse en uno de los libros que más me ha transmitido en los últimos meses.
Cuando una compañera de trabajo me dijo "Bea, hay un libro que tienes que leer. Me recuerda mucho a cómo transmites tú las cosas. Sé que vas a saber ap ...